Eclipse lunar o eclipse de Luna
Un eclipse de Luna se produce cuando la Tierra se interpone entre la Luna y el Sol. Así, la Tierra impide que la luz del Sol llegue a la Luna, por lo que la Luna desaparece completamente de nuestra vista a medida que la sombra de la Tierra la va cubriendo. La Luna no tiene luz propia, sólo brilla porque la luz del Sol se refleja en su superficie. Entonces la Luna se vuelve de color rojizo anaranjado, y esto sucede porque la atmósfera de la Tierra absorbe todos los otros colores del espectro.
Por lo tanto, si la Luna da una vuelta completa alrededor de la Tierra todos los meses, ¿por qué no tenemos un eclipse cada mes? Pues porque no siempre la Luna se interpone en la sombra de la Tierra. Y esto sucede porque la órbita de la Luna está algo inclinada con respecto a la órbita de la Tierra alrededor del Sol. La mayor parte del tiempo la Luna está por encima o por debajo del plano de la órbita de la Tierra. Entre dos y cuatro veces al año, la Luna pasa a través de una parte de las sombras de umbra o penumbra de la Tierra y sucede algún tipo de eclipse.
Los eclipses lunares sólo pueden ocurrir en Luna Llena. Para que suceda el eclipse es necesario que la Luna pase a través de la zona de sombra de la Tierra. Esa sombra en realidad está compuesta por dos zonas de sombra en forma de cono, claramente diferenciadas, una dentro de la otra. Por una parte, la sombra externa o penumbra. Es donde la Tierra bloquea una parte de los rayos del Sol que llegan a la Luna. Por otra, la sombra interior o umbra, es donde la Tierra bloquea toda la luz solar para que no llegue a la Luna.
Claudio Ptolomeo registró en su Almagesto en el año 127 d.C. el eclipse lunar total más antiguo observado por los babilonios el día 19 de marzo de 721 a.C.
Aristarco de Samos aprovechó un eclipse total de Luna para calcular por primera vez la distancia de la Tierra a la Luna. Hiparco se basó en eclipses lunares totales para descubrir la precesión de los equinoccios. Kepler propuso que se utilizaran los eclipses de Luna para medir la longitud de un lugar sobre la Tierra.
Los eclipses lunares pueden ser de tres tipos:
- Eclipse lunar penumbral. La Luna pasa únicamente a través de la zona de penumbra. Son eclipses muy sutiles y difíciles de observar, ya que apenas es perceptible por el ojo humano el cambio en la luz de la Luna.
- Eclipse lunar parcial. Una porción de la Luna pasa a través de la zona de umbra de la Tierra. Este tipo de eclipses son más fáciles de ver que los penumbrales, porque ya se aprecia el oscurecimiento en una parte de la Luna.
- Eclipse total de Luna. La Luna completa pasa a través de la zona de umbra de la Tierra. Estos eclipses son bastante llamativos debido al color rojo anaranjado de la Luna durante la fase de totalidad. En ellos se aprecia totalmente el oscurecimiento de la Luna.
Todos los eclipses totales comienzan con una fase de penumbra, seguidamente una fase de eclipse parcial, después se llega a la fase de totalidad, y terminan con otra fase de eclipse parcial y otro eclipse penumbral.
Aproximadamente un 35% de los eclipses son penumbrales, que son difíciles de observar, incluso con telescopio. Otro 30% son parciales, fácilmente visibles a simple vista. El resto, aproximadamente otro 35% son eclipses totales, bastante sorprendentes de observar.
Cómo observar un eclipse lunar
Los eclipses lunares son totalmente seguros de observar. No se necesita ningún tipo de filtro protector. Una forma muy sencilla de observar un eclipse lunar es a simple vista. También pueden utilizarse prismáticos, que ayudarán a ver mejor la coloración rojiza durante la fase de totalidad. Bastarán con un par de 7X50 o 10X50.
He realizado una selección de los mejores prismáticos para astronomía. Tanto si estás comenzando en la astronomía, como si ya te sabes mover por el cielo. En este enlace te explico qué requisitos básicos deben cumplir unos buenos prismáticos astronómicos.
Si estás comenzando en la astronomía, quizá prefieras unos prismáticos que no sean demasiado caros pero a la vez que sean de buena calidad. También es necesario que no tengan muchos aumentos, para que no se hagan demasiado pesados, y por tanto difíciles de mantener en las manos sin cansarte, por lo que ya se haría necesaria la compra de un trípode. Por tanto, es suficiente con unos 7X50 o unos 10X50.